Los Peos Intelectuales

a propósito de los BC y mensajes que envían, leí un artículo de alguien (que no conozco) comparte junto conmigo, lo que me hace pensar que no estoy solo en mi pensar, le dejo la noticia titulada:

Los Peos Intelectuales

De repente, el país tiene casi 10 millones de sismógrafos humanos y como en río revuelto pescan los vivos, ha surgido una cantidad de “expertos” que se despachan a opinar con una propiedad que raya en lo criminal. Saben de profundidades, de ondas telúricas, son capaces de dictaminar si tal o cual edificio cumple hasta las más avanzadas normas antisísmicas vigentes en Japón y Chile, te hablan de chorrocientas formas de prepararnos y sobrevivir un terremoto.

No faltan los clarividentes que predicen fechas, epicentros y hasta intensidades fantásticas. También son comunes los sermones, las sentencias bíblicas haladas por los moños para demostrar que Dios está enojado y pretende castigar el pecado de los dominicanos abriendo los suelos para tragarse a todo el que ande cerca. Y para ponerle más orégano al sazón, algunos son capaces de enviar  fotos de otros países diciendo que es aquí, con un mensaje descarado capaz de ubicar la escena en nuestro país (ya quisiera yo que hubieran carreteras tan bonitas aquí).
¡Ca-ra-jo!

¿Cómo es posible que sigamos siendo tan imbéciles? ¿Hasta cuando seremos tan crédulos, tan superficiales, tan bolsas de creer lo que cualquier mojamelamecha se le ocurra decir juntando un par de palabritas domingueras? ¿POR QUÉ la gente prefiere un cuento antes que el veredicto de la ciencia? ¿Por qué escuchamos a cualquier “experto local” o cualquier pelafustán enganchado a forjador de opinión, y no buscamos fuentes científicas fiables y comprobables? No ombe, vamos a estar en este pendejo relajo cada vez que tiemble la tierra, o cuando aparezca otro halo solar, o cuando se formen otras nubes mammatus?

¿Por qué todo el mundo se sabe los dembows de moda pero no saben usar Wikipedia ni Google? ¿Por qué antes de hablar (o repetir) un disparate no se investiga si lo que vamos a decir tiene fundamento?

¿Por qué rayos nos da vergüenza aventarnos una flatulencia (sí, un peo, si no se sabe la dominguera) en presencia de otras personas, pero no tenemos ningún problema con vomitar una cagazón de porquerías mencionando un terremoto de 12 grados en escala Richter o que la “placa tectónica de Nagua” se debilitó? ¿Con qué derecho, carajo?

¿Por qué no viene un maremoto de verdad y se traga a todos los azarosos que se inventan estas historias que intranquilizan y mortifican a los demás?

¿Ustedes se imaginan lo sana que sería nuestra sociedad si antes de dar un forward o reenviar un jodido BC, nos detuviéramos a confirmar lo que dice el mensaje? Y sí, ese “filtro natural” debería funcionar con cualquier mensaje, no sólo con los catastróficos, pero por lo menos con estos, que afectan la tranquilidad de tanta gente, NO SEA MONIGOTE y verifique lo que están diciéndole.

Testimonios

Una amiga me envió la información. Se le notaba genuinamente preocupada. Sus hijos habían leído el mensaje y estaban temerosos. Uno de ellos le dijo “mami, ¿y si no te vuelvo a ver?” y mi amiga estaba vuelta un mar de nervios. ¿Con qué derecho se le provoca tal angustia a un niño y a su madre?

Otra persona me envía el mismo mensaje (un poco distinto, en éste lo que venía era un “sunamit”), y me dice “por si acaso, es mejor estar informado”. Yo le digo que eso no es información y se altera. “Eso salió en Internet” me dice convencida de que me mató con eso. Le pido amablemente que busque un enlace con esa información y no logra encontrar más que varios lugares que reprodujeron el mensaje. Al rato se cansó y cambió el tema.

La cosa es que ante tanta desinformación, los mensajes reales no llegan. ¡Qué difícil es hablar la verdad cuando la mentira tiene tantas bocinas! Por eso es vital que dejemos de aventarnos “peos intelectuales” en público y empecemos a ser parte de los que no transmiten disparates. ¡CONFIRMEN ANTES DE REENVIAR!

Lo escribió Dario Martínez Battle, para 40limon.es (25-01-2012)